María Ignacia García
Jefe de Desarrollo e Inversión Responsable de Larr
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¿Tienen algo que ver ESG y SDG?
En 2015, las Naciones Unidas establecieron su agenda de Desarrollo Sostenible de cara al 2030, con 17 ejes de trabajo y metas que llamaron Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODSs o SDG como se les conoce también por sus siglas en ingles). Los ODSs son desafíos sociales y ambientales amplios y globales, que requieren acción colectiva de parte del sector público, privado y la sociedad civil.
Los ODSs se han convertido en un marco de referencia para empresas que han alineado sus estrategias de sostenibilidad a alguno o más de estos Objetivos. De igual manera, son usados por la industria financiera para estructurar y reportar inversiones de impacto.
La inversión de impacto busca proveer además de un retorno económico/financiero, un retorno social y/o ambiental. Cuando se habla de integración ESG, por su lado, se apunta a entender como las variables ambientales, sociales y de gobierno corporativo afectan el valor económico de largo plazo, por lo cual, sin bien guardan relación siendo ambas enfoques de implementación de la inversión sostenible y con el objetivo común de invertir en mejores empresas, son cosas distintas.
Volviendo a los ODS, 2020 marcaba el decenio a la meta, alentando aún más a asumir los desafíos. La irrupción del Covid-19 y los estragos que ha generado a nivel económico y social sin duda dificultan la agenda, pero al mismo tiempo ponen de manifiesto su relevancia y vigencia, como muestra la gráfica a continuación.
Lejos de desmoralizarnos, seamos conscientes de como todos y cada uno podemos contribuir a estos desafíos. Revisa acá las cosas más simples que puedes hacer como individuo ¡sin salir de tu casa!
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